CRISIS
SOCIOAMBIENTAL
Debido a la sobre explotación y acceso desigual a los recursos básicos como el agua, la alimentación y la tierra, se suman los efectos del cambio climático y de las crisis sociales a nivel global que han incrementado en la última década (UNESCO, 2020). Esto plantea un problema de seguridad alimentaria a nivel global que actualmente afecta a 135 millones de personas de manera severa (FSIN, 2020).
Este fenómeno, aunado al incremento de los estragos causados por el cambio climático en la agroecología, han alterado los ciclos reproductivos de los cultivos debido al incremento en la temperatura global y a la dificultad de satisfacer la demanda hídrica de los mismos poniendo en riesgo la seguridad alimentaria (FAO, 2021). Además, estas condiciones aceleran el envejecimiento demográfico de las zonas rurales y la demanda de recursos en las zonas urbanas (IOM, 2021).
Sin embargo, son insuficientes por lo que es necesario dirigir estos esfuerzos de transformación hacia una vida más sostenible mediante acciones que puedan ser llevadas a cabo en pequeños espacios y que involucren a las comunidades de manera directa y continua.
Al proveer de alternativas que refuercen los servicios de primera necesidad, se garantiza el cumplimiento de los derechos humanos de la población aplicando criterios de sostenibilidad en proyectos de apoyo a las familias.